Polos Iguales

No me impacienta que lo entiendas, 

quizás nunca lo escuches, 

ni valores lo que intento ser capaz de explicarme en un poema.

Y es que me resulta tan atrevido escribir sobre ti; 

es un reto escribirle a la perfección con los adjetivos perfectos.

Pero es que sostienes lo ojos más intensos que jamás me han mirado.

Y que cuando pisas,             (y siempre pisas fuerte), 

desarmas todos mis puntos cardinales, 

incluso el norte,       y mira si no quiero yo el norte...

Quiero gritarle al mundo entero que te tengo, que ya te he encontrado.

Pero tú no sabes de mi existencia, aunque sepas que existo; y yo, 

yo ya sabía de la tuya sin saber que existías.

(Porque un día huí, huí para conseguir encontrarte.)

Pero es que esta ciudad se vuelve tan exorbitante cuando necesito de tus vocales.

Y es que supongo que lo trágico de todo esto es que tú no te darás cuenta, 

que tu vida pasará al fino de la mía en copiosa sincronía, 

pero a mi siempre me poseerá la cobardía, 

ese miedo del que no me desharé para colarme en tu ropa.

Pero...¿sabes?,

a mi me sobra con que estés, aunque te parezca una osadía.

Y es que tu has sabido engranarme sin utilizar tus manos, 

y has pasado a formar parte del caos de mi tinta; 

mientras yo, 
yo me doy de ostias con la razón para que me explique porque estoy escribiendo todo esto,   
(y es que mis horas solo avanzan con sentido a tus caderas).

Porque tú eres una de esas razones por las que creo que vivo entre gigantes.

Por eso te agradezco los besos que no hemos tenido, 

ni que tendremos, 

porque ya sabemos lo que pasa con los polos iguales.

Pero no te engañes,   lo imposible es por definición posible;

así que tu sonríe, por favor, 
no dejes de hacerlo.

PERDER-TE

Estas ganas desbocadas de perder; de que se evaporen las cenizas de todo lo que ardió en estos meses.

Porque ya no encuentro en esta ciudad las ganas de prender la lumbre para calentar tus arañazos.

Se perdieron junto al entusiasmo del principio; ese que me hacia besar los pies de las horas que pasaba cosida a tu sombra.

Eso ya no existe, como no existen los minutos en los que cerraba los ojos y gozaba echándote de menos.

Se perdieron en el agujero negro que hoy nos separa; el que esta transformándolo todo.

Porque ya no quiero ser tu hombro, ni tu pañuelo usado.

Estoy aprendiendo a restarte de mi vida sin perder ni un solo pellizco de mi valor; porque me he dado cuenta de que las cuentas sin ti cuentan lo mismo.

Y es que al fin y a cabo solo eras una pieza de mi puzzle, tan insignificante, que sin ella el paisaje no ha cambiado.

He perdido la valentía que arrojaba a dejar de quererme, para quererte.

Todo se esfumó, como lo hacia el humo de tu boda cuando me escupías sueños en los que yo no estaba.

Abandone el calendario en el que descuartizaba los días que me quedaban para volver a olerte.

Ya no quiero malgastar suspiros cerrando mis puertas para abrir las tuyas.

Si, estoy perdiendo, pero esta vez, quiero perder-te.

ERROR 4.0.4.

(De' Mi' Para Ti)

Todo es erróneo.
 Es erróneo estos días grises sin tus estupideces.
Es errónea una rutina sin tus idas y venidas.
 Es errónea mi manera de huir de tu adictiva colonia barata; si, esa colonia que me hace admirar al viento cuando las suelas de  tus zapatos merodean por mi metro de "no dignidad".
Es erróneo que mi desequilibrado estado mental esté sujeto a como  mueves tu culo por el mundo.
Es erróneo buscarte, porque es erróneo encontrarte.
 Es erróneo que triture mi efímero orgullo por olerte un poco más.
 Es erróneo o prestar atención al señor "Del Dujo", y estar llenándome de mierda pensándote, creándote.
 Es erróneo esto, que esta desfachatez mental siga su curso a pesar de la gran contaminación vertida en este río de lava.
 Es errónea mi incapacidad de cerrar las compuertas del embalse en el que ya no hago pie.
 Es errónea mi manera de odiarte a deshora. 
Es erróneo odiarte,
 Es erróneo que desvalijes mi pecho con tus "te necesito", sin necesitarme.
 Es erróneo follarme tu mente, cuando lo que me quiero follar es tu cuerpo.

Estamos hechos de errores.

Es erróneo quererte, lo sé...

pero te quiero.